Siento que vivo
horas robadas
y soy insaciable
ante este camino
lleno de promesas.
Siento que sueño
cuando estoy dormida
y que duermo
cuando sueño que vivo.
Oculto mi ansiedad
de ti
de todos
incluso a veces
de mi también.
Insaciable me quemo las manos
con el fuego de tus caricias
que espero cada tarde
junto al portón desvencijado.
Insaciable encuentro rostros
húmedos y brillantes
que no se parecen a ti
pero que te recuerdan siempre.
Cada minuto robado
lo vivo
por olvidarte...
Insatisfecha me arrastro
clavando estas uñas
en la pared falsa
del abismo de tu memoria.
Insaciable vivo
camino
respiro
siento que muero.
Aún no duermo.
Aún tengo sed sin ti.
2 comentarios:
Es increible como despues de una perdida se puede extrañar tanto, al punto de ver el rostro del ser amado en cala mirada que se nos cruza.
Saludos
aunque si la cuestión es expíar culpas y penas, es mejor dejar irlo, lento pero certero.
besos, ss
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